El jinete portugués Ivo Carvalho gana en Equiocio el Premio Cidade de Ferrol
Borja Villaronga Balsa
Equiocio culmina su trigésima edición, en la que ha vuelto a situar a Ferrol y a toda su comarca en primera línea del mundo de la hípica. El certamen, que tuvo por escenario las instalaciones de As Cabazas, ha contado entre sus grandes protagonistas con el jinete portugués Ivo Carvalho, ganador del Premio Cidade de Ferrol. Y ha reafirmado, además, su vocación de «escaparate turístico» tanto del «destino Ferrolterra» como del Xacobeo, poniendo especial énfasis en la promoción del Camino Inglés, que es el que une la costa atlántica ferrolana con Santiago de Compostela. El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, entregó a Ivo Carvalho su trofeo, en un acto en el que estuvo acompañado por el presidente del comité organizador, Ricardo Pérez Lama. La segunda plaza de la competición fue para Hugo Carvalho —tío del ganador— y la tercera para Javier González Fraga.
Aforo limitado
El certamen, en el que la afluencia de público ha estado limitada, y en el que se extremaron las precauciones para luchar contra el coronavirus, completó su aforo durante los tres días de actividades, con un amplio programa pensado para todos los públicos.
Keylor a puertas de entrar en selecto grupo que compartieron camerino con Cristiano y Messi
Jugó con el portugués durante cuatro años en Madrid y ahora podría ser compañero del argentino en PSG
Keylor Navas ha sido un privilegiado en su carrera por los grandes logros que ha alcanzado así como por la cantidad de jugadores de la élite con los que ha compartido camerino y ahora estaría muy cerca de tener a Lionel Messi de compañero.
FRANCK FIFE/AFP via Getty Images
Son muy pocos los futbolistas que han podido llegar al mismo equipo que el astro argentino, únicamente aquellos que alcanzaron la selección albiceleste e integrantes del FC Barcelona pero tras anunciarse su salida de Cataluña, todo parece indicar que el crack estará dirgiendose al PSG para dejar totalmente fortalecido al conjunto francés.
Si esto termina concretándose, Keylor Navas entraría en un selecto club de jugadores que estuvieron compartiendo camerino tanto con Leo Messi como con Cristiano Ronaldo, los dos han sido los jugadores más influyentes de las últimas décadas y el costarricense podría presumir de haber sido compañero de ambos.
Las infinitas maneras de hablar portugués
El portugués es una de las pocas lenguas del mundo que es oficial en algún país de casi todos los continentes. Se habla, se lee y se oye de manera cotidiana en hogares de Macao o de Goa (India), en escuelas de Timor Oriental, en las calles de Mozambique, Angola o Brasil. El Museu da Língua Portuguesa reabre sus puertas este sábado en São Paulo para celebrar esa apabullante diversidad lingüística con la mirada posada sobre Brasil, pero sin perder de vista los vocablos y acentos del resto de los países que tienen el portugués como lengua propia. Los lusohablantes son una comunidad de 260 millones de personas en siete países a las que poco les une más allá de la lengua legada por la colonización cuando Portugal dominaba los siete mares.
Planteado como un museo interactivo para todos los públicos en este país desigual como pocos, pretende estimular a los visitantes para que reflexionen sobre algo tan cotidiano como el idioma, como explica la comisaria especial Isa Grinspum, encargada del diseño de la colección permanente “El museo quiere traer la complejidad y riqueza del lenguaje que hablamos todos los días. Los brasileños tienen en el fondo un complejo de inferioridad histórico, gigante, de que somos menos porque nuestra formación… porque Portugal… porque africano… porque indio… Es al contrario. Es la singularidad de esos encuentros que solo nosotros tuvimos de esa manera la que produjo cosas maravillosas en la literatura, la música, el cine y en el día a día”, explicaba Grinspum durante una entrevista unos días antes de la reapertura.
El museo se inaugura en un edificio completamente reconstruido después de que en diciembre 2015 quedara completamente destruido por un incendio fortuito que se originó en una exposición. Está ubicado en una hermosa edificación del degradado centro de São Paulo: la estación de ferrocarril de Luz, uno de los primeros lugares donde oían el portugués los inmigrantes que Brasil atrajo desde Europa, África o Asia para sustituir a los esclavos y blanquear la mano de obra. Este jueves, el fuego volvió a amenazar el patrimonio cultural brasileño al desatarse un incendio en un almacén de la Filmoteca de São Paulo.
El Museo de la Lengua Portuguesa busca celebrar toda la diversidad que existe dentro del idioma lusitano. Camila Svenson
Junto a mapas que ilustran el origen del portugués y las relaciones de parentesco del indoeuropeo que le dio origen con otras familias lingüísticas, diversos paneles van mostrando fragmentos de textos eruditos y populares, poemas, publicidad, refranes, etcétera.
Con el ánimo de documentar la inmensa variedad regional y sociocultural del portugués brasileño, los responsables del museo enviaron emisarios por todo el territorio para recabar casi 200 testimonios en vídeo, reflejo cada uno de ellos de un modo de hablar portugués. Ahí están desde los indígenas de Amazonia al pastor evangélico, la madre del candomblé (una religión de origen africano), el profesor, el alumno, la prostituta…
Favela, samba, tanga o saudade son algunas de las palabras portuguesas reconocidas mucho más allá de sus fronteras lingüísticas. Recalca Grinspum que su punto de partida es que “absolutamente todos los hablantes son autores de la lengua”, eliminando jerarquías en este país donde la desigualdad es omnipresente. La idea es que cualquier visitante encuentre su portugués reflejado en esta institución cultural creada en 2006 por el Gobierno estatal de São Paulo en colaboración con la fundación Roberto Marinho, que homenajea al fundador del grupo Globo.
Como la propia lengua, el museo tiene vocación de ser una entidad viva, que se actualiza en que nacen nuevos acentos, vocabulario o neologismos. Cuando las llamas obligaron a echar el cierre en 2015, los debates sobre el lenguaje neutro de género apenas existían en Brasil. Hoy, todas, todos y todes tienen su modo de hablar, escribir y crear reflejado en la institución. Junto con el tupinambá (la lengua de la etnia homónima) y otras de las más de 180 lenguas indígenas que se hablan en la actualidad, también están presentes en formato sonoro o escrito el pajubá, un dialecto de la comunidad LGTB —sobre todo de las mujeres trans— que fusiona el idioma luso con vocabulario yoruba para crear la identidad cultural de un colectivo constantemente bajo amenaza.
La comisaria de la colección permanente, Isa Grinspum, posa en el Museu da Língua Portuguesa días antes de la inauguración. Camila Svenson
Si bien la lengua se actualiza gracias a la creatividad de sus hablantes, que la convierte incluso en arma de resistencia, el portugués como identidad común en un territorio tan vasto como el que ocupa Brasil (similar al que tenía al independizarse hace casi dos siglos y que equivale al doble de la Unión Europea) se forjó “a hierro y fuego”, explica Grinspum. “Los jesuitas agarraron el tupí, que se hablaba en la costa, y a partir de él, para facilitar la colonización, crearon la llamada lengua general indígena, que se habla hasta hoy en algunos rincones de la Amazonia”. Se conoce como nheengatu y se oye incluso en las fronterizas Colombia y Venezuela.
Fue ese proceso de imposición violenta de la lengua el que alumbró un portugués distinto del que se habla en la antigua metrópoli. Para los hispanohablantes, por ejemplo, la variante brasileña resulta más fácil de comprender que la original de Portugal. Grysnpun atribuye esa mayor facilidad al legado de los esclavos africanos traídos por la fuerza: “Es por la influencia de las lenguas africanas, sobre todo del bantú, que son más vocalizadas, de vocales abiertas y (pronunciación) más lenta”.